31 de mayo de 2013

CUANDO LA NECESIDAD APRIETA


Si te digo que a partir de mañana no tendrás que pagar más por la comida, ni perder el tiempo en la cola del supermercado,  ni averiguando de dónde proceden los alimentos, e incluso puede que sea otro quien cocine para ti…¿estupendo, verdad?.

Ahora viene la segunda parte: ¿Cuál es tu reacción cuando te comunican que para ello es necesario que te impliques en la recolecta de alimentos y comestibles, una vez cada tanto, o que des tu apoyo en el comedor popular que se lleva a cabo una vez al mes en el barrio en el que vives?
Y en este punto surge la diferencia, esa gran brecha que sin duda es lo que nos hace ir por detrás. Que no nos deja avanzar en la sociedad actual, dejando que sean otros quienes decidan por nosotros.

¿Qué hace que los españoles sigan atados a mapas mentales de consumo y a una realidad que ya es no solo un espejismo, sino que se ha demostrado ser una evidente falacia de cara al desarrollo personal y grupal?  ¿Es que no nos interesa, como tal, avanzar? ¿Es que la ley del menor esfuerzo ha impregnado nuestros cerebros de tal modo que solo lo que consigo a cambio de dinero es válido en nuestro hogar?

14 de mayo de 2013

¿Estamos locos o qué?

No sobran cer...ebros en este país, y aunque me cueste decirlo, tampoco estamos para comprar aquellos que nos servirían, si no para sacar este terreno de 504 645 km2 adelante, sí al menos para darnos un empujoncito cerebral a muchos.
Me faltan Joseluises San Pedro, Teresas Forcades, con o sin toga; echo de menos a todos esos jueces que por separado me demuestran y me hacen creer que sí existe una justicia de todos y para todos, del lado del empobrecido, del pobre injustamente apaleado por unas leyes retrógradas y consensuadas en su tiempo por juristas que hoy en día seríamos magnánimos tildándoles de obsoletos, cuando lo cierto es que rozan lo caricaturesco.